viernes, 29 de mayo de 2015

Me apasionan los perros y aprendí a adiestrarlos»

El jefe de Bomberos Voluntarios es además instructor de unidades caninas desde hace años

José Luis Andrade Vaquero, de 48 años de edad y natural de Villanueva del Fresno, es desde hace 20 años policía local, jefe de Bomberos Voluntarios desde 1993 y desde hace dos años instructor de unidades caninas de Policía Local en la Escuela de Seguridad Pública de Andalucía, ESPA. También pertenece a la Asociación de Miembros de Unidades Caninas de Policía Local, Aucapol.
 



José Luis Andrade en una de sus demostraciones.
Los primeros perros policías surgieron en Inglaterra en 1888, aunque no sería hasta el siglo XX cuando empezaron a ser entrenados para ello, siendo reclutados de forma militar en la Segunda Guerra Mundial en Estados Unidos. De allí nace el cuerpo K–9, por su homófono con la palabra canino en inglés ‘ca–nine’.
Desde entonces todos los perros policías son denominados K–9 y su uso está mundialmente extendido.
–¿Cómo se adentra en el mundo de los perros K–9?
–Desde siempre ha despertado mi interés ese tema, me apasionan los perros y quería aprender a adiestrarlos para desarrollar el trabajo con ellos. En 2010 tuve la oportunidad de asistir a un curso en Badajoz, donde aprendí el marcaje pasivo, que es cuando el perro olfatea la sustancia y se sienta para que tú la localices. En Totana (Murcia), realicé otro curso tras el que vinieron otros tres en Badajoz en la Academia de Seguridad Pública de Extremadura. Al poco tiempo regresé de nuevo a Burgos y también a Madrid para realizar sendos cursos, todos para aprender a entrenar unidades caninas.
–¿Desde cuándo es instructor de unidades caninas?
–En 2013 desarrollé en Burgos un curso intensivo con el coordinador jefe instructor de las unidades caninas en Burgos, Javier Macho, con el que conseguí la titulación definitiva. Con él aprendí el marcaje lapa, que es cuando el perro localiza la sustancia ilegal y marca exactamente el lugar pegando su nariz a el, permaneciendo quieto hasta que el policía le hable. El marcaje lapa es el más usado por los policías locales ya que a diferencia del marcaje activo los perros no excavan para sacar la sustancia lanzándola lejos en algunas ocasiones.
–¿Cuántos cursos imparte al año?
–Como miembro de Aucapol imparto, junto a otros compañeros, dos cursos al año. Están dirigidos a las nuevas plantillas de policía local. Solemos tener 25 alumnos que proceden de toda Andalucía y que realizan el curso durante cinco meses. En ese tiempo sólo hay una semana de clases presenciales, haciendo un seguimiento diario de los progresos a través de los medios informáticos. Los cursos son teórico–prácticos y constan de dos fases en las que tanto el policía como el K–9 son examinados. Desde Aucapol también se realizan exhibiciones benéficas para recaudar fondos para asociaciones de discapacitados, así como charlas en colegios e institutos para la prevención de drogas en menores, en colaboración con el Plan Nacional de Drogas. José Luís Andrade dedica todo su tiempo libre a su trabajo como instructor, actualmente tiene tres perros. Dos ellos ya entrenados y uno en preparación. También colabora con otros policías en el adiestramiento de sus perros, que lleva a su casa durante un tiempo intermitente. A nivel local participa con su K–9 en controles de la Guardia Civil. Últimamente ha sido juez en el Concurso Nacional de Policía y Bomberos K–9.

FUENTE www.lectorkioskoymas.com

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